CR El delegado de los jesuitas en Cataluña, Pau Vidal, ha expresado con dureza y contundencia la "gestión nefasta" que hizo la Compañía de Jesús en los casos de abusos sexuales de Lluís Tó en Bolivia. Lo ha dicho en una entrevista conjunta en El Periódico y TV3 en la que salen a la luz cartas y documentos que acreditan el conocimiento de los delitos por parte de los responsables de la Compañía en aquella época, y que la mayoría ya están muertos.
Una documentación que evidencia, afirma Vidal, "la gestión nefasta de la situación", y sobre todo, "como los abusos se silenciaban" y "se ponía al abusador en el centro y no a la víctima". Un caso, reconoce Vidal, "profundamente lamentable", del que se tenía constancia desde 1968.
Vidal también habla claro en la entrevista de cómo en la propia Compañía de Jesús hay dos tendencias a la hora de enfrentar los problemas. "La generación actual de jesuitas que tenemos cargos de responsabilidad en la Compañía nos encontramos con una cultura del silencio", explica. Muchas de las personas responsables de entonces ya han muerto, pero otras, reconoce, “siguen mirando hacia otro lado. Y hay personas que no entienden la gravedad de esos hechos”.
Por otro lado, y a pesar de las dificultades internas, Vidal sigue defendiendo que la Compañía está actualmente plenamente comprometida con la tarea de esclarecer el pasado y colaborar con la justicia. "No tenemos voluntad de ocultar", afirma.
Vidal reconoce también que no ha podido hablar con quien era entonces el responsable de la Compañía. Si lo tuviera delante, explica, “compartiría algunos testigos de personas abusadas por Tó para que comprendieran la gravedad de sus hechos durante décadas”.
