(David Casals / CR) Barcelona ha acogido este miércoles 9 de octubre el primer homenaje que se ha hecho en Cataluña a las víctimas de la 'Noche de los Cristales rotos', el primero de los episodios de violencia extrema e indiscriminada contra el pueblo judío durante el nazismo.
El acto lo han organizado las cuatro comunidades judías que hay en la ciudad de Barcelona: Comunitat Israelita de Barcelona , Atid, Bet Shalom y Jabad. Lo han hecho con colaboración de instituciones y otras entidades israelitas, y ha tenido lugar en la Plaza de Sant Jaume de Barcelona.
El evento se realiza el mismo día de la 'Kristallnacht' o 'Noche de los cristales rotos'. Fue el 9 de noviembre de 1938 cuando se produce un "punto negro, un punto de inflexión en la historia del judaísmo", como ha puesto de manifiesto el presentador del acto, el periodista Tomás Morgenstern.
"91 judíos fueron asesinados esa noche. 7.500 tiendas, cientos de casas y sinagogas fueron destrozadas por actos de violencia gratuita contra los judíos "en Alemania, Austria y la antigua Checoslovaquia.
Entre los templos que quemaron, destaca la Nueva Sinagoga de Berlín , un edificio que no volvió a reabrir sus puertas hasta el año 2007.
"Después de aquella noche de violencia antisemita, los nazis iniciaron las detenciones masivas de judíos y su consiguiente envío a campos de concentración ... Se podría decir que la Noche de los Cristales Rotos fue el lamentable preludio del Holocausto", ha añadido Morgenstern.
El detonante de la 'Noche de los Cristales Rotos' fue la muerte de un joven diplomático alemán en París a manos de un joven judío, algo que "sirvió como excusa perfecta para el régimen de Hitler para justificar la violencia pública en contra de los judíos ". Las semanas posteriores a la 'Noche de los Cristales Rotos' se promulgaron leyes y decretos racistas: expropiar las propiedades, prohibición de trabajar, ir a la escuela, conducir, asistir a teatro o cines. Todo culminaría con la 'Solución Final': el asesinato de seis millones de judíos en campos de exterminio.
En el acto, se han encendido 91 velas, una por cada víctima de aquella noche, y en nombre de las comunidades, han intervenido los rabinos Bar Hen de la Comunidad Israelita de Barcelona, y David Liberson de Jabad Luvabich.