AINA ARGUETA -CR Barcelona ha acogido el simposio y la asamblea del Movimiento de Trabajadores Cristianos Europeo (MTCE), donde se ha ofrecido un espacio de formación sobre la importancia de la democracia y el papel que desempeñan las organizaciones de trabajadores. La copresidenta de la Acción Católica Obrera (ACO), Rocío Elvira, valora el encuentro internacional y asegura que las problemáticas de los trabajadores son las mismas en todo el mundo. "El encuentro ha sido una oportunidad para conocer otras iniciativas que se están aplicando en el extranjero", dice.
La jornada, que se celebró a finales de septiembre, se centró en 'El estado de derecho y una democracia que funcione como requisito previo para la prosperidad social'. La copresidenta del MTCE, Olinda Marques, explica que el tema ha sido escogido porque las organizaciones de trabajadores no son ajenas a la realidad social en la que viven. A través del método de Revisión de Vida, basado en el "Ver, Juzgar y Actuar", los militantes de las diferentes organizaciones analizan las situaciones que les plantean, buscan similitudes con las que conocen y tratan de idear un plan de acción.
Karl Brunner, copresidente del MTCE, argumenta que no encuentran tanta dificultad al sentir unión entre movimientos hermanos porque comparten los mismos valores. "Estamos convencidos de que estos problemas sólo pueden ser resueltos con una perspectiva global porque la economía y la situación política son internacionales", asegura.
El consiliario del MTCE, Josep Jiménez, explica que la intención de sus movimientos es "hacer presente a la Iglesia en el mundo común y corriente". "La mayoría de gente es trabajadora", argumenta, por lo que "la pastoral habitual de la Iglesia debería ser la Pastoral Obrera porque va dirigida a la mayoría de los cristianos".
Durante los tres días, se contó con la labor de varios intérpretes que se encargaban de traducir las intervenciones que los representantes de cada movimiento hacían en su lengua materna. El encuentro también contó con la ponencia de la eurodiputada francesa Gwendoline Delbos Corfielf que explicó la situación preocupante que se vive en Hungría y Polonia con el ascenso de la extrema derecha al poder.
El obispo Sergi Gordo, responsable de la Pastoral Obrera y el Apostolado Seglar en la Conferencia Episcopal Tarraconense, que se ha desplazado desde su nueva diócesis de Tortosa para estar presente en el inicio de la Asamblea del MTCE y presidir la Eucaristía con la que se ha puesto fin al Seminario el sábado. “Tengamos fija la mirada en el iniciador de la fe y quien le da desempeño: Jesús. Desde la Pastoral Obrera, continúen con palabras y gestos de consuelo y ánimo. Por favor, no pierdan las fuerzas”, ha dicho.
ACO, en Cataluña
El movimiento que ha acogido la asamblea del MTCE ha sido ACO, uno de los dos movimientos de acción católica que hay en Cataluña. Elvira ha reconocido que es muy importante "la confianza que ha depositado la MTCE" al escogerlos para acoger a la asamblea y también les ha permitido compartir con militantes de otros movimientos obreros de Europa.
Elvira reconoce que su gran reto es llevar todo el trabajo realizado a los grupos de Revisión de Vida. En su próxima asamblea nacional, el día 12 de octubre, se presentarán las conclusiones del simposio y será el momento en que los grupos aprovechen las líneas de trabajo conseguidas.
"Nosotros trabajamos con la base", explica, y ahora, volvemos a remarcarnos que "los trabajadores más precarizados necesitan, al igual que todos, dignidad en el trabajo".
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