Este artículo apareció pocos días después de celebrarse el Atrio de los Gentiles en Barcelona en el boletín del Centro de Estudios Jordi Pujol. Y comienza así:
"A mí me parece que ha sido una gran idea, más apropiada que nunca, dadas las circunstancias particulares que vivimos en el mundo occidental. La idea surge -no puede ser de otra manera- de un intelectual eminentemente cristiano, el Papa Benedicto XVI, un hombre que conoce perfectamente el sentido de nuestra cultura occidental, absolutamente cristiana, tal como decía T. S. Eliot en su ensayo Notes Towards the Definition of Culture, publicado en 1948. Para él cultura y religión son la misma cosa, inseparables la una de la otra, ya que la cultura nació en el seno de la religión, casi los enlaza un cordón umbilical, como escribe Mario Vargas Llosa en su último libro La civilización del Espectáculo."