La segunda lectura de este domingo escoge un par de fragmentos del capítulo 4 de la segunda carta a Timoteo (2 Tm 4,6-8.16-18). Nos encontramos en las postrimerías de la carta y su estilo corresponde al género de los discursos de despedida. El autor pone en boca de Pablo los sentimientos que le produce la proximidad de la muerte.
Ante el fin que se acerca, el apóstol hace un repaso de su vida y ve en la muerte el acto mediante el cual la vida puede ser una ofrenda, tal los sacrificios que las antiguas religiones, entre ellas el judaísmo mientras tuvo templo, ofrecían a las divinidades. La libación era una ofrenda de leche, o miel, raramente agua, o vino. La Ley, la Torá prescribía que junto con los sacrificios de animales se debía ofrecer vino en libación (Ex 24,40 ; Nm 15,7.10 ; 28,7.24). La ofrenda del vino era el último ritual que se hacía después de haber sacrificado un animal. Dicho esto, la expresión "ofrecer la vida como libación " toma un sentido muy pleno, ya que la libación es el último acto del ritual de una ofrenda, la libación es una ofrenda que corona toda una vida hecha oblación. El autor de 2 Tm tiene muy presente, seguramente, que en Fl 2,17, escrito auténtico de Pablo, el apóstol habla de su sangre derramada en libación en el sacrificio, que la fe de los filipenses ofrece.
Hay más expresiones en el texto que nos llevan al verdadero Pablo: "He combatido el buen combate ", en algunos pasajes de las cartas de Pablo, la tarea del apóstol, el rechazo a las falsas doctrinas y las dificultades son presentadas como un combate: "Las armas de nuestro combate no carnales... con ellas deshacemos sofismas" (2 Co 10,4 ) . "Sosteniendo el mismo combate en que antes me visteis " (Flp 1,31) . " Apfia, nuestro compañero de armas" ( Flm 1,2). La frase "he llegado a la meta en la carrera " se inspira indudablemente en 1 Co 9,24-25 donde se compara la vida de seguimiento a Jesús con una carrera, que, si no desfallece la fidelidad, termina con el premio de la corona. Al ver que la carrera llega a su fin, Pablo anhela obtener el premio de la corona de la que se considera digno.
Es muy difícil averiguar el real trasfondo histórico de la noticia que el autor de 2 Tm da sobre el juicio de Pablo ( v.16 ). El libro de los Hechos de los apóstoles concluye diciendo que Pablo, después de apelar al César (25,11) se pasó dos años en Roma con un cautiverio similar a un arresto domiciliario, que le permitió aún esparcir el mensaje de Jesús (Hch 28,16.30). La duración encaja con el tiempo que se prolongaban las apelaciones al emperador, que se resolvían ante sus tribunales en causas que solían ser largas. Por lo que se puede deducir de Ac 20,22-25.37-38 ; 21,10-11) la sentencia fue condenatoria y Pablo murió en Roma, pero a Lucas no le interesa el final del proceso, porque su única preocupación es el cumplimiento del encargo de Jesús de ser sus testigos hasta el extremo de la tierra " (Hch 1,8) . Lleganda la predicación en Roma el encargo de Jesús se ha cumplido, lo que le pueda ocurrir a Pablo, poco importa.
¿A qué encarcelamiento y juicio se refiere el autor de 2 Tm? Es el mismo que describe Lucas, o bien conoce el autor de 2 Tm una fuente de información que no nos ha llegado a nosotros?. El texto da a entender que la preocupación del autor no es la veracidad histórica sino la enseñanza que se desprende de contrastar el abandono, que sufre Pablo en la sesión judicial con la liberación y la salvación que le otorgará el Señor. Para Pablo la boca del león, imagen inspirada en el salmo 22,22 para describir el abandono por parte de Dios, es más peligrosa que la muerte que le espera, resultado de la sentencia judicial. Ser abandonado por Dios es la peor de las muertes
Domingo 30 durante el año
27 de Octubre de 2013
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