El bisbe emèrit de Mèrida-Badajoz escrivia el passat 6 de març a l'ABC sobre la necessitat de cercar els punts comuns de la humanitat davant el repte que diferents tradicions culturals i religioses convisquin no ja al món global sinó sobretot en ciutats com les nostres.
Recorda Montero que "a raíz de la Segunda Guerra Mundial, funcionaba en Ginebra una Oficina que expedía certificados de ciudadano del mundo. Con esa o con otra fórmula tendríamos que afianzar en la colectividad humana, y más en la cristiana, la convicción de que «todo hombre es mi hermano»; incluso en poblaciones como Vilanova (Barcelona) y El Egido (Almería), con inmigrantes de más de treinta países".
http://www.abc.es/20110306/latercera/abcp-mundo-globalizado-sola-famili…