¿Todos los caminos conducen a Roma? La historia de Jorge Mario Bergoglio parece confirmarlo aun a su pesar. El suyo fue un sendero angosto, el que transita la gente más humilde, el sendero de la sencillez, de la austeridad, del amor y de la denuncia. Por allí sólo se puede avanzar a pie. Bergoglio decidió recorrerlo con tesón y amor incondicionales hasta q
Us ha agradat poder llegir aquest article? Si voleu que en fem més, podeu fer una petita aportació a través de Bizum al número
o veure altres maneres d'ajudar Catalunya Religió i poder desgravar el donatiu.