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(TSKV) Cuando haces un regalo, tienes cuidado de que el envoltorio no desmerezca la calidad del regalo. Cuando quieres decir algo importante cuidas las palabras que usas, el modo de decirlas y el lugar desde el que las dices.

Cuando lo que queremos mostrar es el centro de nuestra fe, la verdad fundante en torno a la que se arraigan todas las demás el cuidado ha de ser extremo. No podemos abandonar a la suerte la comunicación del hecho más importante de nuestra fe cristiana: la victoria de Jesús sobre la muerte, su resurrección, el fundamento de nuestra esperanza. Este es uno de los objetivos de la Pasqua Jove que se celebra cada año en Raimat; mostrar con un vocabulario visual y contemporáneo la experiencia cristiana de ser testigos de la Resurrección.

Muchas veces los que aún nos consideramos jóvenes, hemos escuchado como respuesta a la queja de que la misa es aburrida que no se va a misa para divertirse, o cuando hemos sugerido que se podría estudiar cómo comunicar mejor el hecho eucarístico se nos dice que lo importante no está en la forma sino en el misterio que se celebra, cosa que es cierta. Pero, celebrando el mismo sacramento, no sería mejor que no aburriéramos a la gente? Que el entorno de celebración no hubiera quedado estancado en el tiempo? Que los fieles pudieran transmitir con palabras y expresiones contemporáneas lo que viven en la celebración por que ésta ya las facilita? (seguir llegint)

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